Título: Un hermoso lugar para morir
Autor: Malla Nunn
Edición: Siruela, Barcelona 2011
Una mañana de septiembre, un cadáver aparece flotando boca abajo en un río cerca de Jacob’s Rest. En la orilla, una manta, un farol y aparejos de pesca. Todo parece más o menos claro: la víctima vino a pescar de madrugada y alguien le disparo por la espalda desde una cierta distancia. Sin embargo, no va a ser tan sencillo para el detective Emmanuel Cooper: estamos en Sudáfrica, en 1952, recién estrenadas leyes del apartheid, y el muerto es el comisario Willem Pretorius, un afrikáner de pura cepa. El lío está servido.
La novela es un poco embrollada, al menos a mí me ha costado hacerme con todos los personajes y la red de relaciones entre ellos. Y tampoco me ha gustado que el nudo (lo siento por el spoiler) terminara siendo básicamente una trama de corrupción moral, que propicia unos cuantos pasajes, en mi opinión, demasiado explícitos. En el lado positivo, la descripción del ambiente del apartheid sudafricano, muy lograda, y el doble hilo argumental, ya que el caso lo van resolviendo en paralelo el detective Cooper y Piet Lapping, del temido Departamento de Seguridad, una auténtico animal.
La recomiendo, pero con la boca pequeña.
Damos la bienvenida a Quadern de mots, a Belén y a la Librera con gafas (qué nick más chulo)
3 de marzo de 2012
Un hermoso lugar para morir (Siruela)
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NUNN Malla
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Me gusta que esté ambientada en Sudáfrica y que esto esté bien reflejado. Le puedo perdonar el embrollamiento.
ResponderEliminarA ver qué te parece, ya nos dirás.
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