30 de septiembre de 2011

¿Qué es un clásico?

Leo en Bienvenidos a la fiesta dos definiciones de Borges de los libros que llamamos «clásicos», tomadas ambas de Diálogos (Seix Barral, Barcelona 1992), una selección de sesenta de las noventa conversaciones radiofónicas que tuvieron, entre 1984 y 1985, Borges y Oswaldo Ferrari. Me gusta más la segunda.

«[T. S.] Eliot pensó que sólo puede darse un clásico cuando un lenguaje ha llegado a una cierta perfección; cuando una época ha llegado a una cierta perfección. Pero yo creo que no: creo que un libro clásico es un libro que leemos de cierto modo. Es decir, no es un libro escrito de cierto modo, sino leído de cierto modo; cuando leemos un libro como si nada en ese libro fuera azaroso, como si todo tuviera una intención y pudiera justificarse, entonces, ese libro es un libro clásico». (…) «Es decir, que un clásico es un libro leído con respeto. Por eso yo creo que, el mismo texto, cambia de valor según el lugar en que está: si leemos un texto en un diario, lo leemos en algo que está hecho para el olvido inmediato (…). En cambio, si leemos ese mismo texto en un libro, lo hacemos con un respecto que hace que ese texto cambie. De modo que yo diría que un clásico es un libro leído de cierta manera».

«Creo que releer es un placer tan grato como el de leer, como el de descubrir. Además, cuando uno relee, sabe que lo que relee es bueno, ya que ha sido elegido para la relectura. Y aquí recuerdo a Schopenhauer, que dijo que no había que leer ningún libro que no hubiera cumplido cien años, porque si un libro ha durado cien años, algo habrá en él. En cambio, si uno lee un libro que acaba de aparecer, se expone a sorpresas no siempre agradables. De modo que la virtud de los clásicos sería esa: el hecho de haber sido aprobados, claro que muchas veces por la superstición, otras veces por el patriotismo… en fin, por diversas cosas. Pero, con todo, el hecho de que un libro haya durado, bueno, demuestra que hay algo en él que los hombres han encontrado, y con lo cual quieren reencontrarse».

5 comentarios :

  1. Estoy más de acuerdo con la segunda definición y con lo que se dice en ella.

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  2. También me gusta más la segunda definición. No me gusta mucho eso de que un clásico es leer un libro de cierto modo, porque eso ya es un condicionamiento que te obliga a que te guste, o que tengas que soltar la parrafada obligada.

    Me gusta más la segunda porque se parece más a mis palabras chungas de que ha pasado el filtro del tiempo. Como algún político que otro u otros personajes algo conocidos e influyentes. Si tienes que hablar bien de ellos hay que hacerlo casi a escondidas (no me refiero a Zp, of course), pero estoy convencida que con el paso del tiempo, cuando lleguen historiadores libres porque son de otro tiempo, pudieran acercarlos a ese otro tiempo con otra visión. Algo así.

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  3. Un clásico, para un número elevadísimo de personas, es un Madrid-Barcelona. Es lo que hay

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  4. tambien estoy de acuerdo con que la segunda definicion es mucho mejor para un clasico...

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  5. Hola a todos, y perdonad el retraso. A mi me gustan las dos: un clásico, opino, es un libro "probado" y que lees con cierta actitud (por eso cuando no te gusta te preguntas qué ha fallado, tú o el libro). La gamberra aportación de Donan tampoco está mal, la verdad.

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